domingo, 28 de septiembre de 2008

Ona!


Bueno pues esta es Ona, una cocker recogida de la perrera de Granollers. Su historia es tan triste como la de la mayoría de chuchines que hay en todas las perreras. La encontraron atada al quita-miedos de la autopista. Quién sabe cuanto tiempo estuvo allí la pobre, aunque yo siempre he pensado que tuvo mucha suerte. No todos los dueños tienen la "delicadeza" de atarlos para que por lo menos no sean atropellados en medio de la carretera. Supongo que su vida fue un infierno, con sus dueños, pero la perrera no fue mucho mejor. Resulta que nos hicieron abonar una cantidad de dinero en concepto del chip, la esterilización y las vacunas. Lo único que le pusieron fue el chip, porque ya estaba esterilizada y para las vacunas, nos dieron cita para otro día, misteriosamente aquel día, la perrera se fue con la música a otra parte y no volvímos a saber nada hasta hace poco, que nos enteramos de que habían abierto otra... Lo peor de todo fue el día que nos la entregaron, mi chico fue a buscarla, le dijeron que la estaban lavando y aun me pregunto cómo y con qué. Se la dieron empapada, chorreando,temblando, apestando a vete a saber qué y medio coja. Tenían que coger el tren para venir a casa y mi chico temía que les echaran de la peste que echaba la perra. Cuando llegó a casa tuvimos que limpiarla como unas tres veces para dejarla más o menos decente, quitándole hasta un palo de chupa-chup de la pata.
Sé que las perreras están demasiado llenas, y que no pueden hacer más, pero tampoco veo correcta la forma de actuar de esta perrera en concreto. Está claro que un perro que va a la perrera no va a un hotel de 5 estrellas pero se espera que allí cubran unos mínimos de comida, cariño, salud que en esa perrera dudo mucho que se cumplieran.
Ya hace 3 años que está con nosotros y todavía conserva manías y miedos de aquellas experiencias, como su obsesión por las basuras en busca de comida, miedo a las pelotas, no saber jugar a nada... pero también hay que decir que a lo bueno se ha acostumbrado rápido, como a dormir en el sofa y esas cosas que hacen los perros cuando se creen como una personita más...
En fin, que es toda una joya...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y yo que me alegro por el animal. Sabes que dice Don Antonio Gala de ellos? "Mis perrillos". Simple, llano, amén de directo al alma. Ciertamente, las perrereas son como los humanos: vanos y muy superficiales en cuestion de sentimientos varos. He leido vuestro blog y veo que lo que impera es el amor que sentis el uno por el otro. Qué felicidad siento por ello, la verdad!! No sé si fuiste tú, aunque creo que es él el que escrbió el post en mi espacio, pero teneis mucha vida juntos, muchos "hoteles" que celebrar, extensión e paisajes por ver. ¿Los premios? Vosotros ya teneis el vuestro: amaros cada día como si fuera el último. Un saludo y ya sabeis que os sigo con alegría y atención.

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